La ganadería garantiza el futuro

La ganadería se ha consolidado como un sector clave en la gestión de recursos naturales. Hoy en día, más del 50% de las granjas existentes en la Unión Europea tienen ganado, un ganado que consume el 86% de la materia seca existente, reduciendo así el riesgo de incendios. De esta manera, la ganadería consigue dejar atrás su estigma de producción ineficiente, convirtiéndose en garante de paisaje y biodiversidad. 

En este sentido, hoy en día el 80% de la Superficie Agraria de la Unión Europea (alrededor de 3,4 billones de hectáreas) son praderas de siega y pastizales que almacenan carbono y un cuarto de dicha superficie corresponde a pastos no convertibles y terrenos marginales que ayudan a conservar el paisaje y la biodiversidad. Así pues, la ganadería es hoy en día el principal abono natural de los campos europeos, y gracias a los hábitos de consumo de los animales, consigue posicionarse como una de las principales resistencias a la desertificación. 

Apostar por la producción ecológica 

En este contexto, la firme apuesta del Servicio de Sacrificio y Despiece de Zubillaga-Oñati por un modelo de producción basado en la cercanía, que logra reducir la huella de carbono del producto a consumir por el cliente, queda reforzada. Además de trabajar hacia el fomento de la ganadería, gracias a la apuesta por tratar ganado local, año tras año la entidad aumenta la cantidad de servicios facilitados a productores de carne ecológica. De esta manera, las emisiones durante el servicio que se realiza en Zubillaga se limitan al transporte por carretera, un índice que se ve claramente reducido al apostar por un modelo de cercanía. Así pues, el Servicio de Sacrificio y Despiece de Zubillaga-Oñati está listo para afrontar los retos venideros, convirtiendo el vacuno en un sector sostenible a largo plazo.